Amenazas a muerte a Rosalina Domínguez son el resultado de la imposición del proyecto Agua Zarca
Desde el lunes 29 de abril, se han sostenido agresiones permanentes contra la compañera Rosalina Domínguez y más personas de la comunidad, por parte de miembros de la familia Madrid y Nery Méndez, vinculados a la empresa DESA, amenazándoles de muerte con armas de fuego y machetes.
La imposición del Proyecto Hidroeléctrico Agua Zarca (PHAZ), en la comunidad de Río Blanco, ha dejado una estela de violencia que aún no se ha podido resolver.
Factores como, las comunidades no cuentan con seguridad jurídica sobre la tenencia de sus tierras, la no cancelación de la concesión ilegal de este proyecto de muerte, la impunidad en el caso de Berta Cáceres y la impunidad en todos los ataques perpretados en contra de miembras y miembros del COPINH, por la familia Madrid, los sicarios Mejía y la empresa DESA, han permitido la división y creación de conflictos, no sólo en Río Blanco, sino en muchas otras más comunidades a las que se les quiere imponer proyectos extractivos, esto como estrategia para la implantación de los mismos, avalada por los grupos de poder y estado hondureños.
Exigimos al Estado de Honduras y al Comisionado Nacional de los Derechos Humanos de Honduras, que garanticen la seguridad y la protección de la vida de la compañera Rosalina.
A continuación, presentamos un resumen del caso de la compañera y acciones de solidaridad de distintas organizaciones: