BERTA CÁCERES tiene conectado su cuerpo con la lucha, como el río con la tierra. (de Karla Lara, cantora y comunicadora feminista)
Berta Cáceres es una mujer, casi podríamos decir alta, para el promedio lenca, es trigueña y de un tiempo para acá, entre golpes, caminatas, tomas de carretera; tiene curtida la piel, así que ahora tiene un tono canela más oscuro que en otros tiempos, le ha crecido el pelo y es como su espíritu, rebelde, no agarra puesto y ella lo cubre con sombreros de junco de ala ancha y sus pañuelos coloridos, en un intento de “ordenarse un poco” porque siempre hay gente pendiente de sus pasos, de sus palabras, de sus propuestas, de sus desafíos.
Berta tiene más años de los que aparenta, tiene risa picarona y humor agudo, le gusta la broma inteligente, tiene tres hijas y un hijo, es cautelosa para hablar, mueve los ojitos porque yo creo que piensa más rápido de lo que habla, entonces va hilando pero sin atropellarse, a lo mejor es como ella dice: “hay que hacer la refundación por adelantado”, y ella habla así, como por adelantado y mientras gesticula, es muy obvio que en su mente se está tejiendo otra frase, considerando algo que quedó suelto en el análisis anterior, es de una aguda capacidad de ver el todo, de apropiarse del lenguaje en el uso correcto de los términos, es una lidereza indiscutible, y los señores y los gendarmes del “poder extractivo transnacional” saben del poder de esta mujer, les da miedo su entereza, les da miedo que sepa tanto, que esté tan conectada, que hayan tantas feministas, indigenistas, pacifistas, creadoras, soñadoras, tejedoras, defensoras, constructoras, cantoras; que la queremos, cuidamos, protegemos, valoramos y que la defendemos.
Durante la audiencia el pasado jueves 13 de junio, en Santa Bárbara, en la que se dictó sobreseimiento temporal con suspensión de las medidas sustitutivas, que en la práctica, significa que Berta ya no tendrá que ir a firmar todas las semanas al Juzgado en La Esperanza y que podrá salir del país y además, que la parte acusadora no presentó suficientes evidencias para probar el cargo imputado que era el de posesión ilegal de armas en contra de la seguridad del Estado.
Lo que si se probó en esa audiencia es que se trataba de un juicio político, quedó develado los compadrazgos entre Jueces, ejecutivos de DESA y SINOHYDRO, y Alcaldes vendidos y estos poderes y el triste papel de los monstruos como el Banco Mundial, el BCIE y FICOHSA. Lo que si se probó en ese juicio es que las posibilidades de Berta de mover opiniones importantes como las de Premios Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, Jody Williams; personajes relevantes como Nora Cortiña de las Madres de Plaza de Mayo, y miles de firmas de personas, de instituciones y de organizaciones a nivel nacional e internacional exigiendo su Libertad; lo que si se probó es que hay muchas “Bertas” con el hecho de mantener la toma a pesar de que mucha gente de Río Blanco y del COPINH tuvo que moverse a las audiencias tanto en La Esperanza como en Santa Bárbara.
¿Habrá desubicado al monstruo chino que la toma siguiera aunque “la charraluda”, como le dicen ellos despectivamente a Berta, estuviera en prisión primero y en audiencia luego, moviendo más y más gente, más y más gritos libertarios, feministas, indígenas, populares?. ¿Será que el poder transnacional tiene que aprender con Berta el significado de la palabra convicción, de la palabra colectivo, de la palabra comunidad, de la palabra río para la vida y no para la venta?.
¿Será que ese es el legado histórico de una toma que se sostiene por más de 77 días?. Es eso lo que nos enseñan las Bertas de Río Blanco, los Tomasitos, las Paulas, los Aurelianos, a estar en muchas partes al mismo tiempo, porque tienen conectados sus cuerpos con la lucha, como el río con la tierra, y se van moviendo, y se van moviendo, y van corriendo por otras luchas, por otras tomas, por otras Bertas, por otra Honduras con nuestra valiosa y querida Berta Cáceres por el Río Gualcarque.