Palabras de nuestra coordinadora general Bertha Zuniga Cáceres
Como es de su conocimientos estos 4 años han significado, en el medio del dolor de la perdida de una persona tan importante, un intenso trabajo de búsqueda de justicia pero también de seguir caminando los pasos de Berta.
Hace 4 años, el primer pensamiento que tuvimos fue la incertidumbre, pensar ¿cómo vamos a seguir con este trabajo?, ¿Cómo vamos a continuar lo que ella había emprendido?, Cómo demandar verdad y continuar su lucha?
Hoy venimos a decirles que en estos momentos nosotras empezamos a ver claramente lo de que hablábamos, es decir el contubernio entre las empresas privadas que se dedican al despojo de los territorios y de los pueblos y el Estado, que contribuye a este despojo y tiene toda una estructura y estrategia para esconder a los criminales.
No sorprendió que las primeras hipótesis de la investigación sobre su asesinato, como es proprio de un Estado y sistema patriarcal, tuviesen como linea de investigación nuestra misma organización y afirmaban que Berta había sido asesinada por un crimen pasional.
Desde el primer momento nosotras tuvimos grandes dificultades en saber qué era lo que estaban investigando, y cómo se iba a acceder a esta información.
Ustedes nos acompañaron en el primer y único juicio que tuvimos para el caso de Berta Cáceres, y saben que esta información sobre las investigaciones es parte del derecho de las víctimas y también saben que, en este primer proceso, nos enfrentamos toda clase de irregularidades. Muchas personas no pudieron hablar en el proceso no pudieron dar su testimonio y su versión de los hechos, porque Berta Cáceres fue asesinada por ser una mujer lideresa, una mujer indígena.
En esta lucha, sobre todo por el acceso a la información, los familiares fueron expulsados del proceso y tuvimos que interponer amparos con abogados porque no resultábamos parte de este proceso. Ustedes saben que hay mucha impunidad, y ya 4 años sería un tiempo suficiente para que el pueblo de Honduras tomara acciones en contra de los responsables. Porque no creemos que este Estado dictatorial vaya a hacer algo, y por eso vamos a seguir construyendo la justicia para los pueblos.
Algo bastante grato para nosotras ha sido poder haber construido, con el apoyo solidario, acciones internacionales que concluyeron en informes independientes para tener una verdad. Personas como el grupo internacional de los expertos y calificados, pero también personas que nos han acompañado en las audiencias.
Hoy les queremos decir que como organización hemos entendido que en este momento del proceso de lucha, reafirmamos que nuestro verdadero camino es acompañar la lucha de los pueblos, para que no se repitan estos crímenes y para construir nuestro proceso soberano y autónomo. Recordemos que el día en que Berta Cáceres fue asesinada, en este mismo lugar, se estaba organizando un foro sobre la energía comunitaria, porque la energía también es un derecho de los pueblos y las empresas y los gobiernos la quieren quitar, la quieren privatizar.
Hoy les venimos a decir que este es el llamado a convocar la lucha por el agua, porque todos los territorios en que andaba Berta Cáceres tienen una lucha por el agua, sea por los ríos, los mares, en contra de la hidroeléctrica o de la industria pesquera y hotelera. Los pueblos estén protegiendo el derecho fundamental al agua, porque es claro hoy más que nunca que los grandes intereses internacionales están detrás de todo despojo del agua.
Por eso invitamos a la lucha por el agua, porque sabemos que cualquier empresa que controla el agua controla la gente, y no sólo en los territorios indígenas y campesinos, sino también en las ciudades, donde se está iniciando esta luchas por el agua.
Una de las ausencias más grandes que tiene Berta Cáceres es justo en este proceso articulador, donde hay una deuda inmensa porque todavía y no hemos encontrado la manera para unir estos discursos de resistencia, hemos hecho esfuerzos pero no hemos terminado.
Nuestro propósito es hermanar estas luchas y encontrar una razón o una manera para que podamos hermanarnos, porque tenemos la responsabilidad de toda la población. Por eso es que hay tanta diversidad en esta lucha, que hay gente de otras ciudades y de otros países que se unen a esta resistencia
Más allá de eso de la lucha por el agua y la justicia, nuestra lucha es de construir un país de justicia y la democratización de nuestro país y eso también significa luchar en contra de la dictadura y de este modelo neoliberal, y para materializar la autonomía en nuestros procesos y en nuestros pueblos.
Nos sentimos profundamente conectadas con las luchas de otros lugares del mundo, como los Mapuches y con otra luchas en contra de las hidroeléctricas y en contra de proyectos que a veces convencen la opinión publica de que son buenos pero al final resulta que no. Para fortalecer estas luchas estamos acá.
Compañeros y compañeras, para esta jornada les deseamos toda la concentración y energía y amor posible, porque esto es lo que nos ha mantenido acá en todo este tiempo.
Hoy hay que compartir nuestras experiencias y esperamos que no tengan miedo, que compartan porque no queremos monopolizar la palabra y tenemos el compromiso desde nuestra organización de mantenernos en esta lucha y seguir adelante con el proceso organizativo que impulsa el Copinh.
Seguimos en diferentes comunidades con diferentes luchas continuando con la memoria de nuestra compañera Berta Cáceres, y les agradecemos el esfuerzo de haber venido acá a compartir con nosotras.
Vamos a terminar con una consigna y con mucha energía decimos :
¡Berta no murió, se multiplicó!
¡Berta vive vive, la lucha sigue sigue!